News 314 - Marzo 2020

Día Internacional de Mujer

Desde el Hospital Británico acompañamos a la mujer en todas las etapas de su vida y celebramos su transformación hacia la equidad. En este día aprovechamos para concientizar sobre el HPV, virus que de acuerdo la Asociación Argentina de Oncología Clínica (AAOC), 8 de cada 10 personas lo portan, y es la Infección de Trasmisión Sexual más prevalente en el mundo.

¿Qué es el HPV?

El HPV (Virus del papiloma humano) afecta la piel y mucosas de la vulva, vagina y cuello del útero. Si bien esta infección está relacionada con el cáncer de cuello uterino, vulva y vagina, siendo muy frecuente en las personas sexualmente activas, en la mayoría de los casos se resuelven sin dejar consecuencias. Solo una muy pequeña proporción de las personas afectadas por este virus puede desarrollar en el largo plazo una lesión maligna. El tabaquismo, el estrés o un estado de depresión de la inmunidad, pueden ser factores que condicionen el desarrollo de estas enfermedades. La infección se transmite fundamentalmente por vía sexual, aunque no exclusivamente. Cualquier tipo de contacto íntimo de piel con piel o piel con mucosas es potencialmente infectante. Es por ello que el preservativo, muy útil para la prevención de muchas infecciones de transmisión sexual, puede reducir en un 70% las infecciones producidas por estos virus. Cualquiera puede infectarse, no se requiere de ninguna condición especial.

¿Qué es el PAP y cuándo debo hacerlo?

El Papanicolaou y la colposcopía (son estudios que se complementan), se realizan con el objetivo de detectar cambios incipientes que pudieran ser precursores del cáncer del cuello uterino ya que estas lesiones son asintomáticas en sus estadios incipientes. Tomadas a tiempo, el tratamiento adecuado puede evitar la progresión a un cáncer. Si se detectara un cáncer en estadios iniciales, los tratamientos disponibles son altamente efectivos. Es de fundamental importancia el control de rutina periódico para poder detectarlas. Este virus está presente en casi la totalidad de los cánceres del cuello uterino. Sin embargo, la mayoría de las veces, su presencia solo provoca cambios mínimos en el cuello uterino, llamadas lesiones de bajo grado, que solo requieren de una vigilancia y control más estricto.

¿Cuándo comenzar los controles?

-Dos años luego de haber comenzado con la actividad sexual. -Una vez al año, o más seguido, si su médico se lo indica, ante algún factor de riesgo. -Realice controles periódicos en salud, no espere a sentir algún síntoma.

¿Cómo debo prepararme para realizar el PAP?

-Tenga una cita para una fecha alejada de su menstruación. -Evite relaciones sexuales por 48 horas previas al estudio. -No realice lavados vaginales. -No utilice tampones, óvulos, cremas y/o talco por 48 horas previas al estudio.

¿Es necesario que me haga la prueba de Papanicolaou si me vacuné contra el HPV?

Sí. Debe hacerse la prueba si se vacunó contra el HPV. Vacunarse contra el HPV reduce significativamente las posibilidades de desarrollar cáncer, pero no las elimina por completo. Existen tipos virales no incluidos en la vacuna que pueden ocasionar lesiones. Por esa razón, no puede prescindirse de los controles.

¿Qué pasa si tengo un PAP anormal?

Son simplemente una prueba inicial, y la mayoría de las mujeres con una prueba de Papanicolaou anormal no tienen cáncer. Si su prueba tiene células “anormales”, el ginecólogo es el único que puede interpretarla y eventualmente puede solicitar otra prueba para confirmar el diagnóstico. El virus de HPV puede generar ciertas lesiones en el cuello uterino que se ven reflejadas en el PAP. Si las lesiones son de bajo grado generalmente se resuelven de manera espontánea, manejándose con control. No obstante, en algunos casos cuando las lesiones son de alto grado no se irán por sí solas. En esta fase, se considera que las células son "precancerosas": dicho de otra manera, si no se detectan y se tratan podrían convertirse en cáncer cervical. Para hacer el diagnóstico preciso sobre si las lesiones son de bajo o alto grado se pueden necesitar otros estudios como una biopsia.

¿Cómo se hace el tratamiento de las lesiones de bajo y alto grado?

Las lesiones de bajo grado pueden desaparecer sin tratamiento. Lo único que puede ser necesario es un seguimiento más estricto con PAP y colposcopia. Si los cambios no desaparecen o empeoran, su médico podrá evaluar la necesidad de un tratamiento. El tratamiento para las lesiones de alto grado consiste, por lo general, en extraer la lesión por medio de una intervención quirúrgica, ésta puede realizarse con diferentes técnicas. Habitualmente es un procedimiento denominado LEEP o procedimiento de escisión electroquirúrgica, el cual utiliza radiofrecuencia para extraer el tejido anormal. En ocasiones pueden ser necesarios otros procedimientos complementarios.

¿Hay alguna forma de prevenir el HPV?

Contamos, actualmente, con vacunas altamente eficaces para la prevención de las lesiones premalignas y malignas ocasionadas por el HPV, aprobada por el ANMAT en 2006 e incorporada al plan oficial de vacunación desde 2011.

Recomendaciones:
- Realizar PAP regularmente.
- Discutir con su médico la conveniencia de la vacunación contra HPV.
- Utilizar preservativo para evitar el contagio de las infecciones de transmisión sexual.
- Evitar el uso de tabaco.